Cualquiera que practique regularmente la práctica tántrica durante varios años (meditación, entrenamiento mental, respiración y ejercicios físicos) encontrará que la percepción se vuelve más refinada y la vida en su conjunto es más pacífica y armoniosa. Uno se abstiene cada vez más de juzgar a los demás y fluye con el flujo de la vida más fácilmente y sin resistencia. Las relaciones amorosas en particular pueden beneficiarse de los logros tántricos: tanto en términos de interacciones amorosas entre sí, como en la comunicación y las experiencias sexuales muy atentas y presentes.
¿Qué efectos positivos has observado durante tu camino tántrico?